
Esto me hace preguntarme cuales son los limites, nuestra privacidad termina cuando la invaden y si se puede volver a recuperar algo que han utilizado en nuestra contra.
No hay justificación válida para la invasión de nuestra privacidad. Por otro lado, somos nosotros los que hemos dado información a este agujero negro llamado Internet, sin preocuparnos o cuestionarlos que puede pasar si sale a luz.
Un ejemplo de ciberdelincuencia, son las miles de fotos privadas de actrices y modelos que se han filtrado en las redes, y que ahora, su difusión es imparable. (Hasta que salga un cotilleo más jugoso, claro.)
Los delitos en Internet empiezan a tener consecuencias ante la ley, pero pillar a la persona causante de estos delitos es complicado.
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